Tristeza, enfado o sorpresa. Se llama Muecas y haciendo honor a su nombre, esta cabeza robótica es capaz de simular expresiones faciales. Pero aún hay más. El objetivo es conseguir que Muecas pueda ver y escuchar, como lo hace un ser humano.
Tristeza, enfado o sorpresa. Se llama Muecas y haciendo honor a su nombre, esta cabeza robótica es capaz de simular expresiones faciales. Pero aún hay más. El objetivo es conseguir que Muecas pueda ver y escuchar, como lo hace un ser humano.