La aventura emprendedora de Francisco José Gómez comenzó en 2012, el año que se quedó en paro. Aprovechó su experiencia en sistemas de identificación automática y comercio exterior para crear, junto a su hermano, una empresa de innovación tecnológica dedicada a ofrecer servicios que otros no realizan: Qualica-RD. Su nicho son “cosas muy raras” que las han permitido diseñar credenciales para los Juegos Paralímpicos de Londres 2012, la Cumbre Iberoamericana de Cádiz o impulsar un nuevo modelo de pago vía dispositivos móviles.