El sevillano Benito Moreno es pintor, cantautor y escritor. Polifacético amante de la cultura apostó por el mundo creativo siendo niño. Estudió Bellas Artes y fue profesor universitario en Bretaña durante dos décadas. Posee una vasta obra de dibujos y pinturas. Destaca también en el ámbito literario por sus relatos. Apasionado del fútbol, es autor de siete discos reivindicativos será recordado por ser el creador de la sintonía del programa radiofónico ‘El Larguero’.
Antonio León, químico de El Viso del Alcor, en Sevilla, había dedicado toda su vida a la industria de la pintura. Con el estallido de la crisis económica comenzó a pensar en cómo idear un producto que fuera ecológico, innovador y que le permitiera abrirse un hueco en el mercado. Empezó por recuperar la cal elaborada tradicionalmente en horno de leña. Y siguió por sumar nanofibras de grafeno. El resultado, pinturas y morteros más resistentes y naturales con los que, tras solo tres años en el mercado, Graphenstone ha conseguido llegar a 60 países de todo el mundo.
Licenciado en Bellas Artes, Emilio Javier Pérez, nacido en Almería, se decantó por los pinceles desde la niñez. La pintura era su gran pasión hasta que conoció la técnica del grabado de la mano de un profesor de la Escuela de Arte de Almería. Desde entonces en su corazón habitan dos pasiones que, aunque diferentes, le ayudan a expresar al mundo su visión crítica de la vida, lo que él denomina el ‘surrealismo onírico’. Su extensa obra, con casi 10.000 trabajos, está repartida por casi toda España y buena parte del mundo en países como Alemania, Italia o Estados Unidos. Ha participado en 48 exposiciones individuales y 50 colectivas.
El almeriense Dionisio Godoy nació en el seno de una familia de pintores en el año 1932. No tuvo que aprender a dibujar ni a pintar, era algo innato en el que era nieto del pintor Emiliano Godoy, hijo del también pintor, Rafael Godoy y sobrino de Jesús de Perceval, uno de los padres del Movimiento indaliano. Referente nacional entre los acuarelistas, su profesión de delineante queda reflejada en sus obras donde se maneja con maestría en la plasmación de dibujos arquitectónicos. Los entendidos y el público destacan también la delicadeza con la que pinta las figuras de sus acuarelas. A los 22 años realizó su primera exposición. La que había sido su profesora, la escritora Celia Viñas, se encargó de la presentación de la misma, siendo este escrito su última publicación antes de fallecer. Además de pintar, Dioniso Godoy ha dedicado 40 años de su vida a recopilar información sobre pintores almerienses del siglo XIX, publicando dos libros sobre ellos.
La sevillana Sabrina Casal ha recibido en 2016 la Medalla de oro del Foro Europa 2001, un galardón que la pintora comparte con prestigiosos profesionales de la cultura y la comunicación. Artista autodidacta, inquieta e insomne, cree, por encima de todo, en el poder de la luz y el color. En su obra destacan principalmente los retratos. “Un buen retrato tiene que capturar el alma de la persona. Y el alma se refleja en sus ojos”, asegura Sabrina en su estudio.
El pintor almeriense Manu Muñoz inició su labor creativa en el mundo del grafiti en 1991. Tras participar en una exposición junto a pintores reconocidos de su tierra decidió cambiar el spray-aunque no del todo- por los pinceles y dedicarse a la pintura tradicional sobre lienzo. De esta experiencia con el arte urbano le queda su gusto por los grandes formatos y la libertad en la composición de sus obras, creadas junto al mar del Cabo de Gata. Sus cuadros han viajado por medio mundo exponiéndose en Estados Unidos, Japón, Inglaterra, Alemania o Bélgica. Además ha recibido varios premios nacionales de los que destaca el Certamen de Jóvenes Creadores de los Países Mediterráneos.
