Su familia formaba parte de la cooperativa que fabricaba queso en Montefrío (Granada) y que tuvo que cerrar. Nieves Zamora y sus padres adquirieron la compañía y desde entonces Queso Montefrieño se convirtió en una empresa familiar. En 2017 han conseguido una medalla de oro y otra de bronce con dos de sus variedades en los World Cheese Awards, uno de los mayores reconocimientos del sector a nivel mundial. Pero no son las únicas medallas que han conseguido estos años en estos galardones.
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María Orzáez, una maestra quesera que cambió la química por la ecología
La sevillana María Orzáez dejó su trabajo en la industria química para vivir en el campo hace algo más de una década. Su intención entonces era dedicarse a la elaboración artesanal de queso de cabra. Tras un período de formación con maestros queseros en la Provenza francesa y superar las dificultades de los inicios, esta maestra quesera lleva sus productos ecológicos elaborados con leche de cabra autóctona a diversos rincones del planeta: Suiza, Reino Unido, Bélgica, Estados Unidos… Los vende por internet bajo la marca Mare Nostrum.
Inmaculada Rodríguez, quesos onubenses con reconocimiento internacional a su calidad
Inmaculada Rodríguez era ama de casa cuando asumió el reto de revitalizar la quesería Dehesa Dos Hermanas, ubicada en Santa Bárbara de Casa, en Huelva. Tres años después, sus quesos de oveja han sido reconocidos con dos medallas de plata en el World Cheese Awards de 2015, un prestigioso certamen internacional celebrado en Reino Unido en el que cada año compiten queserías de todo el mundo.
Una quesería de la Sierra de Grazalema logra convertir sus quesos en los mejores del mundo
Dos de los quesos que elaboran Ramón Gago y su hermano Miguel en el Parque Natural de la Sierra de Grazalema (Cádiz) bajo la firma El Bosqueño han sido reconocidos como los mejores de su categoría en el último Concurso Mundial de Quesos que cada año se celebra en Inglaterra.