Ecopiba es la primera planta de reciclaje en España que culmina el 100 % del reciclado de pilas. Se trata de una iniciativa nacida en Málaga que consigue, mediante un procedimiento químico, dar una segunda vida a todos los componentes de una pila usada. Ya hay plantas de reciclaje de pilas dentro y fuera de España interesadas en este modelo.
Un grupo de alumnos de Secundaria del Colegio Claret de Sevilla trabaja codo con codo con el CSIC en una investigación real que trata de dar un uso más sostenible al agua del regadío de la fresa onubense. Esto es posible gracias al innovador acuerdo entre el CSIC, la empresa Infocultivo de Huelva y el centro escolar sevillano, en el que también colabora Vodafone, que logras varios objetivos: despertar vocaciones entre el alumnado, intercambiar experiencias y llevar a cabo investigaciones que no serían posible por falta de medios.
La Escuela Politécnica Superior y la Facultad de Ciencias Experimentales de la Universidad de Almería han ideado unos jardines verticales que unido a los muros existentes en las autovías de cemento, hormigón o vidrio, reduce en hasta un 50 por ciento el ruido provocado por el tráfico. Se trata de un invento novedoso pensado para zonas áridas puesto que se realizan con plantas que requieren poco riego.
La comarca almeriense Los Filabres-Alhamilla es la protagonista de las Rutas Almendro en Flor. Se trata de un proyecto que impulsa el turismo de interior a través de su principal atractivo de esta época del año: los almendros en flor. Con estas jornadas pretenden dar a conocer el paisaje de la zona, transmitir el afán de estos pueblos por el desarrollo sostenible en su agricultura y ganadería y también poner en valor su pasado histórico y cultural.
La empresa almeriense Entomotech es la única de Europa que produce harina de insectos para incorporarla a piensos animales. La Universidad de Almería colabora analizando los distintos tipos de insectos y sus propiedades para fabricar piensos ideales a cada especie. Los insectos se alimentan de residuos agrícolas por lo que ayudan a eliminar el mayor problema del campo: su gestión.
Llevar la lógica al consumo de los alimentos. Esa es la tarea que desarrolla Montse Castro desde Brenes (Sevilla), una educadora medioambiental que tras perder su trabajo ha querido trasladar su filosofía del consumo a la sociedad a través del proyecto Mecológico (Mercado eco-lógico y local). Montse actúa como intermediaria entre productores ecológicos locales y consumidores de la zona llevando a la práctica el kilómetro cero y el comercio justo a través de la agricultura.
